La falta de un plan para gestionar las flotas de vehículos puede aumentar en un 70% los gastos logísticos, algo que evidentemente atenta contra la rentabilidad de cualquier empresa.
La clave para aumentar la productividad de una flota vehicular, al tiempo que se preserva el bienestar de los conductores, es tener un protocolo operativo. En este sentido, a continuación te presentamos una guía con las principales herramientas psicológicas para que tus conductores manejen sus emociones y creen un ambiente de trabajo positivo.
Gestión de flotas: cómo fomentar en los conductores la capacidad para enfrentar circunstancias difíciles
Como gestor de flotas, puedes liderar a tus conductores con un manual para hacer frente a las dificultades propias de su trabajo. En dicho manual deben incluirse elementos relacionados con:
Redes de apoyo
La jornada diaria de un conductor puede extenderse hasta por diez horas, durante las cuales realiza un trabajo que exige mucha concentración y en el que hay poco contacto social. Como consecuencia, el conductor puede sufrir estrés, irritabilidad y depresión, un estado mental nada recomendable para conducir un vehículo.
Por esta razón, es recomendable que planifiques para los conductores actividades que promuevan su bienestar emocional. Con técnicas para entrenar la relajación y la concentración, por ejemplo, se puede reducir la ansiedad hasta en un 60% de los casos y aumentar hasta en un 120% la productividad de los empleados. En el caso de la gestión de flotas, estas técnicas pueden aplicarse para que los conductores cultiven una conducta amable y de disfrute durante su trabajo.
La escucha activa es también importante para reforzar los lazos de amistad y confianza con y entre los conductores. En este sentido, es recomendable que dispongas espacios fuera de las horas laborales para que tus conductores conversen y expresen sus sentimientos: el intercambio de experiencias aumentará la motivación (individual y grupal) y afianzará la seguridad de contar con amigos con los que exponer los anhelos y las preocupaciones.
Enfoque positivo
En cualquier jornada laboral puede haber dificultades o contratiempos. En el ámbito de la gestión de flotas, los conductores enfrentan fallas mecánicas, demoras en las entregas de mercancías o discusiones con compañeros y clientes. Sin embargo, es necesario que los conductores mantengan una actitud positiva para superar los obstáculos y alcanzar las metas.
Por eso es crucial que le brindes a tus conductores herramientas para que desarrollen sus ‘habilidades blandas’, aquellas que les permitirán relacionarse con los demás con asertividad y empatía. El siguiente ejercicio puede ser útil: pide a los conductores que tracen una ruta para llegar a un punto específico. Luego plantea condiciones adversas (tráfico, reparaciones de vías, etc.) que impidan utilizar la ruta inicial; el objetivo es que tracen rutas alternativas para ejercitar su flexibilidad.
También es importante que establezcas criterios, de manera que cada conductor gestione su tiempo y se integre al equipo. Así puedes hacer que tus conductores sean más puntuales cuando transporten pasajeros o mercancías, o cuando deban coordinarse con otras personas para cumplir objetivos empresariales. Finalmente, sugiere ejercicios comunicativos y ofrece retroalimentación sobre situaciones probables (un cliente molesto, unas operaciones retrasadas, un cliente potencial, etc.), para que los conductores se expresen con claridad y brinden soluciones.
Crecimiento personal
Los vehículos y las normas de conducción se actualizan continuamente. Por ello es esencial entrenar a los conductores, para que no cometan infracciones o pongan en peligro sus vidas. Como líder de un equipo de flotas, puedes motivar el aprendizaje individual de los conductores para reforzar su autoconfianza ante situaciones nuevas y mejorar sus fortalezas.
La mentalidad de crecimiento supone una perspectiva de vida centrada en el esfuerzo constante. Es decir, las habilidades adquiridas se perfeccionan cuando se ponen en práctica frente a los retos cotidianos. La mentalidad de crecimiento se manifiesta en la gestión de flotas cuando enseña a sus conductores que:
- La conducción es un ejercicio permanente. Cada día se aprende algo nuevo: una ruta, una ley de tránsito reciente, consejos de mecánica en caso de averías, estilos de conducción eficientes, métodos de seguridad, entre otros asuntos.
- Pedir ayuda a los compañeros o al líder de equipo ante una situación adversa no es una muestra de debilidad, sino la búsqueda de una solución conjunta a un problema de la empresa.
- El fracaso derivado del incumplimiento de una tarea (no llegar a tiempo, tratar mal a un cliente, dañar la mercancía, etc.) es una lección para redoblar el esfuerzo personal y conseguir el éxito en futuras ocasiones.
- Las experiencias exitosas propias que se comparten con los compañeros sirven para que ellos también tengan oportunidades de desarrollarse como conductores.
Autocuidado
A menudo a los conductores les afectan problemas como enfermedades cardiovasculares, diabetes, exceso de peso y trastornos digestivos, musculares, óseos o de sueño. Como gestor de flotas debes cuidar que exista un equilibrio entre la productividad empresarial y el bienestar físico de los conductores.
Fortalece los hábitos saludables de tu equipo con ejercicios de estiramiento y movilidad antes o después de conducir, posturas recomendadas al volante, alimentación e hidratación saludables e higiene del descanso.
También prepara a tu equipo para que evite accidentes causados por errores humanos, como exceso de velocidad, distancia de seguridad, irrespeto a las señales de tránsito, distracciones por el uso de celular, impericias por desconocimiento de la conducción eficiente de los vehículos o de protocolos de transporte de mercancías y, fatiga. Con un equipo saludable, es más probable que se garantice la productividad, la motivación y el cumplimiento de las metas, sin importar las circunstancias.
Conclusiones
La gestión de flotas es una tarea muy compleja. El líder del equipo debe estar atento a la productividad de los vehículos, además del bienestar físico, mental y emocional de sus conductores. Por esta razón, es necesario fomentar prácticas como redes de apoyo, enfoque positivo, crecimiento personal y autocuidado, que le permitirá a tu equipo hacer frente a los problemas del día a día.
Puntos importantes:
- La gestión de flotas exige atender y capacitar a tu equipo de conductores.
- El gestor de flotas debe contar con herramientas para crear un ambiente de trabajo positivo.
- Las principales herramientas para manejar el estrés que supone gestionar una flota son la red de apoyo, el enfoque positivo, el crecimiento personal y el autocuidado.
- Como gestor de flotas, debes enseñar a los conductores a que expresen sus sentimientos, entrenarlos en habilidades blandas y hacer que adopten hábitos saludables.